[Villa Vallis Mellitus] Caballerisas

Todo el territorio era hostil, los suelos se agrietaban por aquellos poderes que convergían en ese lugar,, los arboles eran arrancados por el viento, congelados por el frio o partidos por los rayos, todo era caos y destruccion, en el rostro de paolo se mostraba una gran determinacion y furia hacia aquella jvencita tan insolente y llena de mucha confianza, queria a toda costa destruir esa autoconfianza, sus pulños se cerraban con gran furia y su cosmos se incrementaba favorablemente, sin embargo en su mente una gran lucha mental se llebaba a cabo, su antepasado queria tomar el control y Paolo debia luchar contra eso, no podia permitirlo. desde niño sabia que era diferente a los demas, sus sueños eran extraños, parecia recordar eventos del pasado, nunca le habia gustado la idea de servir a un dios del olimpo, pero en aquellos momentos descubria que su destino lo perseguia, pero que el podia elegir, no servir a Zeus como le habia dicho su familia desde el nacimientos, si no por el contrario, ser virle al dios Abel, a su señor Fye. Dos criaturas fueron invocadas por aquella dama, eran dos hombres, ambos idénticos a fye/abel, por obvias razones Paolo no movió ni un musculo pues eran la imagen de su señor su ano, no podía atacarlo, pues sentía que si hacia algo seria dar a entender que no tenia nigun respeto por al figura del dios del sol, solo se quedo allí, recibiendo golpes, alzaba sus rayos para protegerse pero los ataque de la dama eran muy fuertes y lo hacían caer una y otra vez al piso, y Gellum no era de mucha ayuda solo era un estorbo, paolo se levanto lentamente y el suelo tembló, los cielos rigieron con gran ferocidad y miles de rayos unieron el cielo y la tierra, parecían pilares de energía que sostenían ambos extremos de la creación de gea.

Gellum, santo de athena, no te metas te lo dije, solo eres un estorbo insolente y patético niño, no puedo creer que seas hermano del señor Fye, LARGATE de una vez por todas, paolo se encontraba bastante iracundo, nunca había estado tan fuera de sus cabales como en esos momentos y cuando reacciono su rival ya se había marchado, de algo si estaba seguro, su poder había crecido pero no era suficiente, debía ser invencible, muerte eléctrica, pronuncio paolo y dio la espalda a Gellum, en ese instante todos los rayos se alzaron por los cielo y como lanzas y estacas calleron para hacerle una jaula al joven santo de athena, Paolo no podía perder mas tiempo, debía marcharse de inmediato, así que chasqueo sus dedos y la jaula comenzó a encogerse y mil rayos cayeron sin cesar uno tras otro con el fin de atravesar aquella jaula y a su prisionero, solo eres un estorbo niño, si te vuelves a meter en mi camino, te aseguro que el señor fye tendrá un hermano menos, dicho esto se marcho con rapidez, dejando detrás una estera de destrucción por el encuentro que había acabado de tener con aquella amazona de Abel.